Ver a Dios por la fe, significa adquirir el verdadero discernimiento espiritual

 

 

Libro de Urantia. Pág.1574

 

 

El discernimiento es la evaluación del conocimiento, es mucho más que saber, es vivenciar el conocimiento aun antes de tener la experiencia y esto lo puede hacer sólo una personalidad porque “tan sólo las personalidades poseen el discernimiento antes de la experiencia. Una personalidad puede observar antes de saltar y por tanto aprender de la observación y de la acción de saltar. Un animal sin personalidad, generalmente aprende sólo saltando” 193

 

El discernimiento es como entrar a una pieza a oscuras y encender la luz para ver todo lo que ella encierra, es gracias a nuestra mente, a nuestra fe y a nuestro deseo de evolucionar que podemos llegar al discernimiento, porque “ver a Dios por la fe significa adquirir verdadero discernimiento espiritual. El discernimiento espiritual aumenta la guía del Ajustador, y estos dos terminan por aumentar la conciencia de Dios. Cuando conoces al Padre, estás seguro de la filiación divina, y puedes amar cada vez más a cada uno de tus hermanos en la carne no sólo como hermano con amor fraterno, sino también como padre con afecto paterno.”1574

 

El discernimiento y “fe salvadora nace en el corazón humano cuando la conciencia moral del hombre comprende que los valores humanos pueden ser transformados en experiencia mortal de lo material a lo espiritual, de lo humano a lo divino, del tiempo a la eternidad.”1118 El vivir esta experiencia cambia totalmente nuestra vida cotidiana, porque “vuestra religión cambiará de la creencia intelectual en la autoridad tradicional, a la experiencia real de esa fe viviente que es capaz de alcanzar la realidad de Dios y todo lo que se relaciona con el espíritu divino del Padre. La religión de la mente os vincula sin esperanzas al pasado; la religión del espíritu consiste en la revelación progresiva y os llama constantemente a alcances más altos y santos en ideales espirituales y en realidades eternas.”1731 Las que debemos crear Hoy.

 

yolanda silva solano