No es suficiente que se haya
derramado este espíritu sobre vosotros; el Espíritu divino debe dominar y
controlar cada fase de la experiencia
humana
Libro de Urantia.
Pág.381
Los que vinieron después de Jesús, “en
general perdieron de vista la idea del Padre e hijo, que era la esencia de las
enseñanzas de Jesús sobre el reino, sustituyéndola por la bien organizada
comunidad social de la iglesia. La iglesia de este modo se volvió principalmente
una hermandad social que desplazó efectivamente el concepto e ideal de
Jesús de una hermandad espiritual.”1866
Pablo y
sus sucesores transfirieron parcialmente los asuntos de la vida eterna, de cada
individuo, a la iglesia. Cristo, de este modo, se tornó en el dirigente de la
iglesia, en vez de ser el hermano mayor de cada creyente dentro de la familia
del Padre del reino. Pablo y sus contemporáneos aplicaron todas las
implicaciones espirituales de Jesús que se referían a él mismo y a cada
creyente, a la iglesia como grupo de creyentes; y al hacer así, dieron un
golpe mortal al concepto de Jesús del reino divino en el corazón de cada
creyente. “1866
A
nosotros, en pleno siglo XXI nos corresponde el dar a conocer el Reino y el cómo
llegar a él. Basta de ideologías autoritarias y sectarias, porque Dios ama a
cada ser humano en forma particular Jesús dijo:”Yo soy el representante del
Padre ante el individuo, no ante el grupo. Si
tenéis dificultades personales en vuestras relaciones con Dios, venid a mí, y os
escucharé y os aconsejaré para la solución de vuestro problema. Pero si os
ocupáis de coordinar divergentes interpretaciones humanas acerca de cuestiones
religiosas, así como de socializar la religión, estáis destinados a solucionar
tales problemas por vuestras propias decisiones.”1624
“La semilla de
la verdad teórica está muerta, los más altos conceptos morales no tienen
vigencia, a menos que el Espíritu divino infunda inspiración sobre las formas de
la verdad y estimule las fórmulas de la rectitud. Aquellos que han recibido y
reconocido la presencia de Dios han nacido del Espíritu. «Sois el templo de
Dios, y el espíritu de Dios mora en vosotros». No es suficiente que se haya
derramado este espíritu sobre vosotros; el Espíritu divino debe dominar y
controlar cada fase de la experiencia
humana.”381
Cada
quien tiene sus propias experiencias todas ellas son oportunidades que la
Maestra Vida nos pone para que evoluciones, por eso es indispensable el tener
una mente alerta y activa para saber aprovecharlas sacando de ellas el verdadero
significado, el que está más allá de las apariencias. Cuando realmente sintamos
a Dios en nosotros “todo lo demás se nos dará por añadidura”
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