Jesús enseñó la religión como causa y la ética como
resultado.
Libro de Urantia. Pág.1862
Como dice el refrán
popular “no hay mal que por bien no venga” una de las cosas buenas que ha traído
el descalabro moral por el cual estamos pasando, es que hemos vuelto a usar la
palabra y a pensar en lo que es la ética. Ella es diferente de la moral, porque la moral se basa en la obediencia a las
normas, las costumbres y preceptos o mandamientos culturales, jerárquicos o
religiosos, mientras que la ética busca fundamentar la manera de vivir por medio
de un corazón bien puesto, que no nace de la conveniencia individual, sino que
permite que antes de actuar se piense en la repercusión que nuestras acciones
para con los demás
“La religión evolutiva puede llegar a ser ética, pero sólo la
religión revelada puede hacerse verdadera y espiritualmente moral. El antiguo
concepto de que Dios es una Deidad dominada por una moralidad augusta, fue
elevado por Jesús a ese nivel afectuoso y conmovedor de íntima moralidad
familiar de la relación padre-hijo, de la cual no hay ninguna más tierna y bella
en toda experiencia mortal.”41
Es bueno aclarar, que la religión revelada no es nada espectacular y
privilegio de algunos, pues la verdadera “revelación” llega cuando cada quien
encuentra el verdadero significado de lo que le ocurre, tanto a nivel espiritual
como al material, es una experiencia personal e individual por eso, “la religión
de revelación deberá siempre limitarse a la capacidad del hombre para
recibirla.”1007
“Jesús nunca se preocupó ni por la moral ni por la ética como tales,
pero sí lo hizo y plenamente, por aquella relación interior y espiritual con
Dios Padre. Jesús enseñó la religión como causa y la ética como
resultado.”1862
Podríamos decir que la ética es la consecuencia de ser coherente con
lo que decimos creer y lo que hacemos y pensamos.
yolanda silva
solano