La ciencia del mundo material, permite al hombre
controlar y hasta cierto punto dominar su ambiente
físico.
Libro de Urantia. Pág. 1139
"La ciencia es el intento del
hombre de estudiar su medio ambiente físico, el mundo de la energía materia, la
religión es la experiencia humana con el cosmos de los valores espirituales. La
filosofía ha sido creada por el esfuerzo de la mente del hombre, para organizar
y correlacionar los hallazgos de estos conceptos vastamente separados, en algo
que parezca una actitud razonable y unificada hacia el
cosmos"1136
Sólo cuando logramos unir nuestra espiritualidad a la
ciencia con una mente abierta y sin temores de ninguna especie, logramos un
mayor conocimiento de nuestro cuerpo físico y mental, adquiriendo así un mayor
discernimiento de lo que nos ocurre, porque "la ciencia del mundo material,
permite al hombre controlar y hasta cierto punto dominar su ambiente
físico."1139 porque nuestra mente es eminentemente creadora y por lo mismo
debemos usarla y ponerla a nuestro servicio para mantener nuestro cuerpo sano,
sin por eso desestimar los cuidados físicos de prevención y la aceptación a lo
inevitable pues “en el asunto de a enfermedad y la salud, debéis saber que los
dos estados corporales son el resultado de causas materiales, la salud no es la
sonrisa del cielo, ni la aflicción la ira de
Dios.”1831
Sabemos que el cuerpo humano no es una estructura
anatómica congelada, sino que en realidad es un centro de inteligencia, de
energía e información, que al igual que todo en el universo está hecho de
átomos, compuestos de partículas subatómicas que se mueven a la velocidad de la
luz alrededor de enormes espacios, y que no son objetos materiales, sino
fluctuaciones de energía e información. "La mente es el instrumento cósmico
sobre el cual la voluntad humana puede tocar la discordia de la destrucción, o
sobre la cual esa misma voluntad puede extraer las melodías de identificación
con la divinidad y la supervivencia eterna."1217
Nuestra mente abierta y limpia de
todo lo negativo y consciente de su importancia en nuestra evolución nos ayudará
a mantener nuestro cuerpo físico de la mejor manera posible, pues mientras
estemos en él, somos templos de Dios y el vehículo para alcanzar la
eternidad
yolanda silva
solano