TU NO ERES TU PASADO
Tu pasado no tiene qué definir quien eres hoy.
En ocasiones es difícil diferenciar lo que nos ha ocurrido con
quien somos hoy. He conocido muchas personas en mi vida
que han perdido su identidad. La identidad
que creen y viven es la del dolor del ayer.
Como por ejemplo, cuando escucho a alguien decir: "Soy
una persona que sufrió mucho en la niñez" o "Soy una
persona que le ha ido mal en las relaciones de pareja".
Eso es una realidad en la persona,
pero no tiene que seguir definiendo quien es.
¡Tú no eres tu pasado!
Es cierto que muchas cosas en nosotras son formadas
por causa de nuestra historia. Pero lo que fue ayer no
tiene que controlar la persona que potencialmente
llegues a ser hoy ni tampoco la que serás mañana.
¿Sabes por qué? Porque llegó el momento de soltar
esa mochila. Hay demasiadas opciones frente a ti como
para que sigas perdiendo tu tiempo en lo que ya pasó.
Vas a ¡cerrar esa puerta!, disfrutarás del presente y
avanzarás hacia el futuro con esperanza.
Recuerda que como hija amada de Dios mereces
navegar por inmensos mares de victoria,
independientemente de lo que pasó. ¡Vive libre, vive feliz!