Dios se ha
embarcado en una aventura eterna con el hombre.
Libro de
Urantia. Pág.64
No hay
evolución posible sin cambios de toda índole, porque “nada de lo que toque la
naturaleza humana, puede ser considerado infalible. Indudablemente podrá
brillar la verdad divina a través de la mente, pero siempre con pureza relativa
y divinidad parcial. La infabilidad puede ser anhelo de la criatura, pero sólo
los Creadores la poseen.”1768
De todas
las rutinas, la espiritual es la peor, porque transforma nuestra religión en
prácticas y ritos sin sentido, leemos el Libro porque lo hemos hecho una
costumbre, pero olvidamos sacar de cada enseñanza el significado personal, al
igual que los templos en determinados días están llenos de feligreses pero que
no viven el evangelio y los lectores del LU son muchos... pero sigue habiendo
envidia y descalificación, encasillamos a la gente a veces por una sola actitud,
olvidamos que “es un error juzgar la religión de otro, por nuestras normas de
conocimiento y verdad.”1115
El aceptar
a nuestros hermanos como son y no como quisiéramos que fuesen, es uno de los
grandes cambios que deberíamos practicar, porque “conocerlos, entender sus
problemas y aprender a amarlos es una de las grandes experiencias de la
vida.”1431 Lo habitual, es que le pidamos a los otros que cambien, pero muy
pocas veces estamos dispuestos a cambiar nosotros.
La religión del espíritu que Jesús nos enseña “no es una técnica para llegar a una paz mental
estática y dichosa; sino que es un impulso hacia la organización del alma para
el servicio dinámico. Es enlistar la totalidad del yo para el servicio leal al
Dios amante y para servir al hombre. Es una técnica de vida dedicada, por tanto
es una vida creadora, original y espontánea.”1097 Lo cual no es posible
alcanzar sin un previo y sincero reconocimiento de lo que nosotros somos, para
poder cambiar lo que sea necesario y potenciar lo que ya
tenemos.
Deséamos
que el mundo cambie, pero si nosotros que hemos recibido mucho más conocimiento
espiritual que muchos, no lo hacemos, Urantia no podrá cambiar, porque somos una
parte importantísima de ella, pues “Dios se ha embarcado en una aventura eterna
con el hombre”64 “El hombre es finito, pero reside dentro de él un destellos de
infinidad.”1221
yolanda silva solano