Los Ajustadores, efectivamente comparten las experiencias del vivir de los seres humanos.

 

Libro de Urantia. Pág.1185

 

 

 

 Sabemos que cada ser es diferente a los demás porque tenemos nuestro propio ADN físico y espiritual, por tanto “ la religión del espíritu requiere solamente de discernimiento, no de uniformidad de punto de vista, ni de opinión, porque las religiones de autoridad se cristalizan en credos sin vida, en cambio la religión del espíritu crece en el regocijo y libertad y en aumento en las acciones ennoblecedoras de servicio amante y misericordioso.1732

 

Si los hombres somos diferentes, también lo son nuestros Ajustadores. de hecho están clasificados en siete categorías u órdenes. Al decir que “los Ajustadores son divinos, es simplemente reconocer su naturaleza y origen. La invisibilidad universal de los Ajustadores, sugiere fuertemente su  naturaleza divina, exclusiva y elevada.”1181

 

Cuando decimos que “nuestro Ajustador va a recontar sólo aquellos recuerdos y experiencias que son parte de la carrera universal y que son parte de ella”1235 es porque las experiencias conscientes y volitivas, son las únicas que tienen un valor verdadero porque “nada en el universo entero puede substituir el hecho de la experiencia en los niveles no existenciales.  El preconocimiento de Dios es existencial, por lo tanto, el espíritu del Padre desciende del Paraíso para participar con los mortales finitos en cada experiencia de buena fe, de la carrera ascendente.  Es tan sólo mediante este método, que el Dios existencial, puede volverse en el Padre experiencial del hombre. La infinidad del Dios eterno, abarca el potencial de la experiencia finita, que en efecto se torna actual, en el ministerio de los Ajustadores, los cuales efectivamente comparten las experiencias de las vicisitudes del vivir de los seres humanos.”1185

 

Debemos tomar conciencia de nuestra responsabilidad como hijos de Dios, porque “el suelo del alma en desarrollo es humano y material, pero el destino de esta criatura combinada de mente y espíritu es espiritual y divino.”1738 por tanto nada de lo material debe ser menospreciado, porque “mientras os dedicáis a a obtención de las verdades eternas debéis también disponer para las necesidades de la vida temporal, porque la verdadera religión, no funciona separada del individuo.”1778

 

Si el mundo está como lo vemos, es debido a la gran dicotomía entre nuestra espiritualidad y la vida cotidiana, mientras no busquemos a Dios en nosotros y por nosotros mismos y  bebamos del agua viva que Jesús le entregó a la Samaritana, no podrán fructificar en nosotros, los frutos del espíritu y seguiremos autoengañándonos con una espiritualidad sin vida.

 

yolanda silva solano yosis282@gmail.com