En este mundo actual,
donde la prisa y lo desechable son la tónica, resulta indispensable el crear
momentos de serenidad y reflexión si realmente queremos buscar y encontrar la
superación espiritual, no fuera sino dentro de nosotros mismos, pues no hay
maestro ni libro por sagrado que sea, que pueda evolucionar por nosotros, pues
"ni siquiera Dios puede imponer la salvación a quien no lo desee.1638 pues a
ella sólo se llega por convicción personal y con ayuda de nuestro Espíritu
residente que va contabilizando nuestros actos volitivos y conscientes, no
olvidemos que “muchos de nuestros recuerdos que no han tenido significado
espiritual, ni valor moroncial perecerán con nuestro cerebro
material”1235
El discernimiento de nuestra vida nace
cuando nos damos cuenta que "la fe salvadora nace en el corazón humano, cuando
la conciencia del hombre, comprende que los valores humanos pueden ser
transformados en experiencia inmortal, de lo material a lo espiritual, de lo
humano a lo divino, del tiempo a la eternidad. 1118 No es posible separar lo
humano de lo divino, porque ”la sabiduría del hombre nace de las pruebas y de
los errores de la experiencia
humana.”58
Para ser perfectos como lo es nuestro Padre, no se nos piden cosas
extraordinarias, simplemente que renazcamos, que despertemos de la monotonía que
invade la gran mayoría de nuestros días, y a lo mismo que estamos haciendo en
forma rutinaria, le saquemos el significado de lo valioso que es lo que estamos
haciendo, sin importar si ello es espiritual o material porque “nada es
ordinario para un hijo de Dios”.2049
“La
evaluación moral con significado religioso y discernimiento espiritual,, connota
la elección del individuo entre el bien y el mal, la verdad y el error. La
experiencia religiosa personal, consiste en dos fases: descubrimiento en la
mente humana y revelación por el Espíritu divino residente.”2095