A diario convivimos sin darnos cuenta con
la energía, porque todo lo que nos rodea es energía, los átomos, las moléculas,
los seres vivos, los planetas, las galaxias y todo el vasto universo son en
última instancia energía. La energía se define
como la entidad intangible por medio de la cual podemos generar movimiento,
trabajo y calor. La energía es la fuente invisible que mantiene unido a los
átomos y partículas subatómicas que componen toda la materia del universo,
también es la fuente por medio de la cual podemos aplicar movimiento a la
materia.
“La base del universo es material
en el sentido de que la energía es la base de toda existencia, y el Padre
Universal controla la energía pura. La fuerza, la energía, es la única cosa que
se erige como monumento eterno, que demuestra y prueba la existencia y presencia
del Absoluto Universal. La base del universo es material, pero la esencia de la
vida es espíritu. El Padre de los espíritus es también el antepasado de los
universos; el Padre eterno del Hijo Original es también la fuente en la
eternidad del modelo original, la Isla del Paraíso. La materia y la energía
son diversas manifestaciones de la misma
realidad cósmica, como fenómeno universal es un fenómeno inherente al Padre
Universal. «En él radican todas las cosas». 407
Energía, es
"es un término que utilizamos en sentido amplio, comprendiendo los reinos
espirituales, mentales y materiales."9 y está presente en todo y no puede
crearse ni destruirse, sólo puede transformarse, absorverse o expandirse. En términos
actuales, la energía es reciclave, sin ella es imposible el renacer que Jesús
nos enseñó si queríamos entrar en el
Reino
"El espíritu puede dominar a la mente; entonces la mente
puede controlar la energía. Pero la mente puede controlar la energía sólo a
través de su propia manipulación inteligente de los potenciales metamórficos
inherentes en el nivel matemático de las causas y efectos de los dominios
físicos. La mente del hombre no controla inherentemente la energía; ésa es una
prerrogativa de la Deidad. Pero la mente de las criaturas puede manipular la
energía, y lo hace, en cuanto se vuelve experta en los secretos de la energía
del mundo físico.”1222
Si adquiriéramos una mayor conciencia de esto, podríamos
ser en verdad dueños de nuestro destino, porque “el hombre puede ser un gusano
en el polvo por su naturaleza y origen, pero cuando lo habita el espíritu del
Padre, ese hombre se hace divino en su destino,”1676 si aprendemos a dirigir la
energía que nos rodea, tanto la positiva como la negativa.
yolanda silva solano yosis282@gmail.com