Seguir las huellas de Jesús es “vivir una
vida celestial, mientras se está en la tierra, mediante la diaria sumisión a la
voluntad de Dios”1430, pero esta sumisión no es la de un siervo que obedece a su
amo, sino la de un hijo que obedece a su padre porque tiene la certeza que es
amado por él. “Hacer la voluntad de
Dios, es la experiencia progresiva de llegar a parecerse cada vez más a Dios
porque Dios es el origen y el destino de todo lo que es bueno, bello y
verdadero” 1431.
“No olvidéis jamás que hay tan sólo una
aventura que es más satisfactoria y emocionante que el intento de descubrir la
voluntad de Dios y ésa es la experiencia suprema de tratar honestamente de hacer
la voluntad de divina. No dejéis de
recordar que la voluntad de Dios puede cumplirse en cualquier ocupación terrenal
. No hay vocaciones que sean santas y otras seculares. Todas las cosas son sagradas en la vida de
los que son conducidos por el espíritu, o sea subordinados por la verdad,
ennoblecidos por el amor, dominados por la misericordia y controlados por la
ecuanimidad y la justicia” 1732.
Cuan reconfortante es para una dueña de casa,
para un desconocido oficinista, para un vendedor que se siente defraudado,
porque sus ventas debido a la crisis económica no satisfacen sus expectativas,
el pensar que esos trabajos aparentemente ingratos los pueden transformar en una
herramienta para su superación espiritual.
La mayoría de nosotros no tiene mayor injerencia para cambiar las cosas
que pasan, pero sí tenemos la posibilidad de actuar en forma diferente, de modo
que el pesimismo lo convirtamos en un optimismo esperanzador, el cansancio en
algo más relajado. No es preciso cambiar
de vida, lo que hay que cambiar es la actitud, hacer nuestras esas frases tan
lindas, que Jesús nos enseñó: “He aprendido a contentarme con todo, cualquiera
sea mi situación”1336, porque “mi mañana está totalmente en las manos de mi
Padre en el cielo”1436. “Colocad vuestra
confianza en Aquel que puede sostener el cuerpo y salvar el
alma”1682.
“Jesús no vivió su vida en la tierra como un
ejemplo para que lo copiaran todos los seres humanos. Vivió su vida en la carne mediante el mismo
ministerio de misericordia que todos vosotros podéis vivir vuestras vidas en la
tierra, Jesús dejó un ejemplo para que todos nosotros vivamos nuestros días y como somos.
No podéis aspirar a vivir su vida, pero podéis resolver que viviréis vuestra vida, como y por los
mismos medios que Él vivó la suya” 1426.
Profundicemos
en la vida de Jesús porque “de todo conocimiento humano, el que tiene mayor
valor es conocer su vida y como él la vivió” 2090 en medio de justos y
pecadores, de fieles e infieles, ricos y pobres, cultos e ignorantes, sin hacer
diferencias porque en cada ser humano, El veía a un hijo de Dios que merecía su
amor y su atención.
yolanda silva
solano yosis282@gmail.com