Las dificultades
inflaman el ardor del amante de la verdad, mientras que los obstáculos sólo
sirven de reto a los esfuerzos del constructor intrépido del reino
Libro de Urantia. Pág.
1740.
“Los individuos conocedores de Dios,
no se desalientan por la desgracia, ni se deprimen por las desilusiones. Los creyentes son inmunes a la
depresión. Los que viven en el espíritu
no están perturbados por los episodios del mundo material” 1740 Lo mismo ocurre
con los Ayudantes de los peregrinos que antes de llegar a Havona han aprendido a
disfrutar de la incertidumbre,
alimentarse de la desilusión, entusiasmarse frente a la derrota aparente,
vigorizarse en presencia de dificultades, exhibir valor indomable frente a la
inmensidad, y ejercer una fe inconquistable al enfrentarse con los desafíos de
lo inexplicable.”291
“Jesús sometió a sus mensajeros elegidos a repetidas pruebas de
desilusión y les proporcionó con frecuencia oportunidades llenas de
dificultades, para que ellos seleccionaran entre el camino justo y el camino
erróneo de enfrentar las pruebas espirituales”1768. “En los momentos de prueba se revela el alma
del hombre, la prueba revela lo que verdaderamente alberga su corazón”
1824
“El mortal consciente
de Dios, está seguro de la salvación, no tiene miedo a la vida, es honesto y
constante. Sabe como soportar
valientemente los sufrimientos inevitables, no se queja al enfrentarse con
dificultades insalvables. El creyente
sincero no se cansa de hacer el bien sólo porque esté atribulado. Las dificultades inflaman el ardor del amante
de la verdad mientras que los
obstáculos sólo sirven de reto a los esfuerzos del constructor intrépido del
reino”
1740.
Volvamos ahora al comienzo de esta semana y en un
viaje virtual, imaginemos que estamos junto al molinero y que Jesús posa su
mirada en nosotros y nos pregunta: ¿ Estás moliendo el grano de la Verdad en el
molino de tus experiencias ? ¿ Puedes
darme un ejemplo ? ¿
Qué es para ti la felicidad ? ¿ Cómo vives tus sufrimientos. ? En
el día de hoy ¿Cuál ha sido tu molienda.?
Tratemos de responder a
Jesús con sinceridad, porque el hacerlo nos va a dar la certeza de su promesa:
“ No os prometo liberaros del mar de las
adversidades pero sí, os prometo que navegaré a través de todas ellas con vosotros.”
1767
Yolanda silva solano yosis282@gmail.com