El hombre ha poseído siempre la dote de elección del albedrío en su carrera al Paraíso.

 

Libro de Urantia. Pág.620

 

 

 

 

Al viajero británico Jesús le dijo:  “hermano mío percibo que buscas la verdad e insinúo que tal vez el espíritu de la verdad resida dentro de ti.  ¿ Has probado sinceramente alguna vez hablar con el espíritu de tu propia alma ? .  Tal cosa ciertamente es difícil y rara vez produce la sensación consciente del éxito.  Pero todo intento  honesto de la mente material por comunicarse con su Espíritu residente alcanza cierto éxito, a pesar de que la mayoría de tales experiencias humanas magníficas deben permanecer mucho tiempo como anotaciones superconscientes en el alma de tales mortales que conocen a Dios” 1475.

 

Todos los seres humanos tenemos la chispa divina, un fragmento de Dios que se manifiesta a través de nuestro Ajustador de Pensamiento, es cierto él mora en nosotros, pero lamentablemente pocas veces nos unimos a él, ni recordamos que “el espíritu divino es la fuente de incesante ministerio y estímulo para los hijos de los hombres, pero ni la más elevada de las doctrinas religiosas tiene el poder para transformar el carácter humano, ni para controlar la conducta de los mortales” 380. Porque “el hombre ha poseído siempre la dote de elección del albedrío en su carrera al Paraíso.”620

 

“Los Ajustadores de Pensamiento querrían reemplazar nuestros sentimientos de temor por convicciones de amor y confianza, pero no pueden hacer estas cosas mecánica y arbitrariamente porque ésa es tarea nuestra.  No es misión del Ajustador calmar nuestros sentimientos alborotados ni consolar nuestro orgullo herido” 1192, pero cuando él ve nuestro esfuerzo sincero por salir de estas situaciones, aplica la palanca espiritual de iluminación elevada y progresiva y entonces sacamos fuerzas de las propias flaquezas y nuestra mente se pacifica y podemos salir adelante porque sabemos que “la conciencia humana victoriosa, nace de esa fe que se atreve a desafiar los problemas y limitaciones, con la firme convicción que aunque nosotros no podamos hacer algo, en nosotros vive Alguién que si lo puede hacer: nuestro Padre.”59

 

yolanda silva solano yosis282@gmail.com