Cuando el
hombre y Dios forman una asociación, no se puede poner limitación alguna a las
posibilidades futuras de ella.
Libro
de Urantia. Pág.1229
Ser socios con Dios, no significa cambiar nuestra manera
de vivir, ni aumentar en horas nuestra meditación, quiere decir que debemos
aprender a hacer en forma extraordinaria, lo ordinario del quehacer cotidiano,
para lo cual sólo necesitamos hacernos cada vez más consciente de lo que estamos
haciendo y para qué, pues son nuestras verdaderas y ocultas intenciones, las que
le dan valor de eternidad a lo que hacemos, pues "el hombre no puede jamás
decidir sabiamente sobre los asuntos temporales, ni trascender el egoísmo de los
intereses personales, a menos que medite en presencia de la soberanía de Dios y
tome en cuenta las realidades de los significados divinos y de los valores
espirituales.1093
El crecimiento espiritual no está basado en "los no
harás" porque para ser un digno hijo de Dios, "no basta no hacer el mal, es
preciso aprender a hacer el bien.1736" en forma consciente y motivado no por el
temor al pecado, sino impulsado por la fuerza del amor. Esta es la gran
diferencia entre la Ley antigua y el mensaje que Jesús nos trajo, en donde
desaparecen las exigencias externas del rito y las creencias generalizadas y son
reemplazadas por la religión del espíritu, que es la única que "nos deja por
siempre libres para buscar la verdad, donde quiera que nos lleve el Espíritu
residente.1731 porque la verdad divina no debe ser rechazada porque el canal de
su transmisión sea aparentemente humano. 1733"
" La verdad divina es
una realidad viva discernida por el espíritu. La verdad existe sólo en los altos
niveles espirituales de la comprensión de la divinidad y de la conciencia de la
comunión con Dios. Puedes conocer la verdad, puedes vivir la verdad; puedes
experimentar el crecimiento de la verdad en el alma y disfrutar de la libertad
de su esclarecimiento de la mente, pero no puedes aprisionar la verdad en
fórmulas, códigos, credos o esquemas intelectuales de conducta humana. Cuando
intentas una formulación humana de la verdad divina, ésta muere rápidamente. La
verdad estática es verdad muerta, y sólo la verdad muerta puede ser contenida en
una teoría. La verdad viva es dinámica y tan sólo puede tener una existencia
experiencial en la mente humana.1949