“El hombre, responde a la guía espiritual, así como el gran universo responde a la atracción extensa degravedad espiritual del Hijo Eterno, la cohesión universal de los valores espirituales eternos de todas las creaciones del cosmos finito del tiempo y el espacio.” 1276

Nuestra evolución consiste en buscar y encontrar a Dios donde antes no lo hacíamos, es decir en nuestra vida cotidiana, porque “aislar parte de la vida y llamarla religión es, desintegrar la vida y distorsionar la religión” 1124

Debemos pues “dedicar nuestra vida a la elevación de la tarea diaria, porque para aquel que conoce a Dios, no hay labores comunes, ni tareas seculares” 1960 recordando siempre, que “mientras os dedicáis a la obtención de las realidades eternas, debéis también disponer para las realidades temporales.” 1778

“La experiencia de una vida religiosa dinámica, transforma el individuo mediocre, en una personalidad de poder idealista. La religión sirve al progreso de todos, porque fomenta el progreso de cada individuo y el progreso de cada uno, es aumentado por el logro de todos. La religión ennoblece la rutina común de la vida diaria.”1094 dándole significado a todo lo que hacemos, porque no es tan importante lo que se haga,como la forma en que lo ejecutamos. No basta la impecabilidad por hábito, lo que importa es la intención que motiva nuestras acciones, aún las más corrientes y rutinarias, pues “el alma en evolución no se vuelve divina por lo que hace, sino por lo que trata de hacer.” 557

El fin útimo de nuestra evolución espiritual es la unión con nuestro Padre y todo lo que nos ayude HOY a conseguir estos objetivos de perfección, motivados por el amor y no por el temor al castigo.  De la misma forma, debemos estar atentos a los cambios de la sociedad y también debemos preparar nuestra alma, para el ineludible gran cambio.  Un hijo de Dios, debe estar siempre con sus maletas listas para volver a la casa del Padre, cuándo y cómo El lo determine, con la seguridad que si hemos aprendido a ser felices en Urantia, con mayor razón lo sabremos hacer en los mundos de estancia...

yolanda silva solano  yosis282@gmail.com