La competencia despiadada que
se basa en el egoísmo de miras estrechas.
Libro de Urantia.
Pág.805
Si la globalización fuese
bien empleada y con fines altruistas, podría ser la gran panacea para los males
que afectan al mundo y para solucionar los problemas de los más necesitados,
pero desgraciadamente la globalización actual está inspirada en el paradigma
ligth, que se rige por el más crudo y descarado individualismo egoísta, en donde
no importan para nada los demás si lo que persigo me sirve en lo personal. “La
competencia despiadada que se basa en el egoísmo de miras estrechas, a la larga
destruye aquello que procura mantener.”805
Este individualismo está
siendo fatal, porque cada día se acentúan más las diferencias sociales y el
abismo de adquisición de bienes es cada vez más impresionante, destruyendo así
cualquier posibilidad de hermandad. Los
recitales de artistas y bandas, son cada vez más frecuentes y las entradas son
carísimas, casi lo mismo que un trabajador gana en un mes...y a nadie le parece
inmoral...
Jesús dijo todo lo que
hacéis al más pequeño de mis hijos, a mí me lo hacéis y seguramente cuando
tengamos que rendir cuentas de nuestra vida, también se nos preguntará y se nos
tomaran en cuenta nuestros pecados de omisión, tendremos que justificar el por
qué, no hemos sido capaces de “pasar por la vida, tratando a nuestros
semejantes, como a nosotros nos gustaría ser tratados.” 1451
Se nos olvida que “la religión es tan sólo un humanismo
exaltado, hasta que se la haga divina, mediante el descubrimiento de la realidad
de la presencia de Dios en la experiencia personal. “2084
yolanda silva solano yosis282@gmail.com