Mucho de nuestra vida y sus recuerdos que no han tenido significado espiritual ni valor moroncial, perecerán con el cerebro material

 

Libro de Urantia. Pág.1235

 

 

 

 

El alma es como nuestra persona, pero no es física sino espiritual, ella está destinada a sobrevivir a la muerte física, la simiente oculta del alma humana es un espíritu inmortal, porque “el suelo del alma en desarrollo es humano y material, pero el destino de esta criatura combinada de mente y espíritu, es espiritual y divina”1738; sin embargo a pesar de esto, no siempre el alma, consigue la inmortalidad, porque  “la salvación o pérdida de un alma depende de si la conciencia moral alcanza o no un estado de supervivencia”  1479.

 

“La supervivencia de una criatura mortal se basa enteramente en la evolución de un alma inmortal dentro de la mente mortal.”404 porque “los que logran la unión cósmica perduran, en tanto que los que se quedan cortos de esta meta cesan de ser.”670 porque “el ser identificado con el pecado se destruye a sí mismo al tornarse irreal por la identificación con la iniquidad, es como si nunca hubiesen existido.”37

 

“ En cuanto a las oportunidades de supervivencia mortal, aclaremos para siempre: todas las almas de toda fase posible de la existencia mortal sobrevivirán, siempre y cuando manifiesten el deseo de cooperar con sus Ajustadores residentes y exhiban el impulso de hallar a Dios y de lograr la perfección divina, aunque estos deseos no sean sino primeros destellos de la comprensión primitiva de aquella «luz verdadera que ilumina a todo hombre que nace en el mundo».”467

 

La sobrevivencia eterna, la tenemos que ganar en forma personal en el día a día en forma consciente, porque “ mucho de nuestra vida y sus recuerdos que no han tenido significado espiritual ni valor moroncial, perecerán con el cerebro material” 1235 pues “no hay exhibición de energía ni expresión de confianza, que puedan llevarle más allá de la tumba. Las labores devotas y el genio inspirador de los mejores entre los hombres están destinados a extinguirse en la muerte”1118

 

yolanda silva solano yosis282@gmail.com