Si a veces hablo de ti
no pienses que aún te quiero
es sólo porque recuerdo
lo que contigo sufrí.
Si a veces hablo de ti
o ves que brillan mis ojos
no creas que están llorosos
es que mi risa es así.
Que cuando lloro por ti
ni las estrellas lo saben
yo lloro cuando no hay nadie
que te lo pueda decir.
Que cuando yo pienso en ti
lo hago tan para adentro
que ni mi piel sabe cierto
que muero pensando en ti.
Que no, que no, que no, que no,
que nunca podrás saber
si todavía te quiero
o te dejé de querer.
Que no, que no, que no, que no,
que nunca podrás saber
si todavía te quiero
o te dejé de querer,
que cuando lloro por ti
lo hago siempre en silencio.
Si a veces hablo de ti
no pienses que aún te quiero
es sólo porque recuerdo
lo que contigo sufrí.
Si a veces hablo de ti
o ves que brillan mis ojos
no creas que están llorosos
es que mi risa es así.
Que cuando lloro por ti
ni las estrellas lo saben
yo lloro cuando no hay nadie
que te lo pueda decir.
Que cuando yo pienso en ti
lo hago tan para adentro
que ni mi piel sabe cierto
que muero pensando en ti.
Que no, que no, que no, que no,
que nunca podrás saber
si todavía te quiero
o te dejé de querer.
Que no, que no, que no, que no,
que nunca podrás saber
si todavía te quiero
o te dejé de querer,
que cuando lloro por ti
lo hago siempre en silencio.