También conocida como ‘palo del agua’, la drácena Fragans se
caracteriza por las distintas tonalidades de verde de sus hojas. Para un
correcto desarrollo necesita una temperatura entre 15 y 25º y luz
natural pero no sol directo. Le gusta la humedad alta, por lo que
conviene pulverizar sus hojas un par de veces a la semana o colocar un
plato con guijarros y agua debajo. No precisa demasiado riego, aunque
hay que mantener el sustrato algo húmedo –sin que quede empapado–.
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