El Nican Mopohua, que significa en Náhuatl “Aquí se narra, aquí se
cuenta”, relata las apariciones de la Virgen de Guadalupe al indio
devoto Cuautitlán, bautizado como Juan Diego.
Es el documento histórico con el que se conoce universalmente el
relato en Náhuatl de las APARICIONES de NUESTRA SEÑORA de GUADALUPE a
Juan Diego en el cerro del Tepeyac al norte de la actual Ciudad de
México en torno a 1531. El Nican Mopopua es la primera fuente de
información guadalupana. Está compuesto por 4 bifolios – 16 páginas-. El
original, escrito hace aproximadamente 450 años, se encuentra atesorado
en la Librería Pública de Nueva York, EEUU.
Luis Lasso de la Vega, capellán del santuario, escribe el “Inin
Huei tlamahuiçoltica omonexiti in ilhuicac tlatocaçihuapilli Santa Maria
totlaçonantzin Guadalupe in nican huei altepenahuac Mexico itocayocan
Tepeyacac” (El gran acontecimiento con que se le apareció la Señora
Reina del cielo Santa María, nuestra querida Madre de Guadalupe, aquí
cerca de la Ciudad de México, en el lugar nombrado Tepeyácac), el texto
en náhuatl en el que se narra el “Gran portento” de las apariciones de
la Virgen de Guadalupe al indio Juan Diego Cuauhtlatoatzin en el Cerro
del Tepeyac en el año 1531.
Este libro se trata en realidad de la unión de dos escritos, a saber,
el Nican Mopohua de Antonio Valeriano y el Nican Motecpana de Fernando
de Alva Ixtlilxóchitl, enriquecido con leves adiciones personales del
propio Lasso de la Vega, y llevado, a las prensas por Juan Ruyz, el hijo
de Enrico Martínez, en la Ciudad de México, en 1649.
Aunque Luis Laso de la Vega clama ser el autor del Nican Mopohua en
su totalidad, sin embargo, del análisis de su obra se deduce que Lasso
de La Vega escribió solamente la introducción y la conclusión del libro,
quedando prácticamente establecido por todos los estudiosos, que la
autoría del Nican Mopohua, sin lugar a dudas, es atribuíble al indígena
Antonio Valeriano. (Ver la Guía de Estudio que acompaña a este facsímil
para obtener más información.)
Al
día de hoy todavía existe un gran debate sobre la fecha de publicación
del Nican. La mayoría de las autoridades están de acuerdo en que fue
escrito, hacia el año 1556. De hecho, el historiador Edmundo O’Gorman
(1906-1995) opina que Antonio Valeriano había escrito el Nican mopohua
en 1556. El historiador León-Portilla acepta de la misma manera la
hipótesis de Edmundo O’Gorman.
Sin embargo, un reciente estudio científico del Nican Mopohua
atesorado en la Librería Publica de Nueva York, llevado a cabo por esta
institución, en conjunción con el Museo Metropolitano, ha logrado
establecer, con total precisión, el origen, la ciudad y el fabricante
del papel (estudiando las marcas de agua). Así mismo, un análisis
espectrográfico de la tinta arroja luz sobre la composición química y
los materiales utilizados. Con estos dos datos queda prácticamente
establecido, de manera científica, la fecha de su publicación, con muy
pequeño margen de error. Myrian de Arteni, Senior Conservator for
Exhibitions de la Librería Pública de New York ha colaborado en la Guía
de Estudio que acompaña este facsímil escribiendo un artículo extenso a
este respecto.
Entre los muchos tesoros de la Biblioteca Pública de Nueva York están
los documentos que aparecieron cuando el Nuevo Mundo fue explorado y
colonizado por los europeos. conjunto de documentos conocidos como los
Monumentos Guadalupanos, o Guadalupan Monuments, y un documento en
particular, el Nican Mopohua, que con sus 16 hojas manuscritas en
Náhuatl (con caracteres latinos) representa un auténtico baluarte
religioso y cultural
¿Por qué es tan importante el Nican Mopohua de la Librería Pública de Nueva York?
La gran importancia del Nican Mopohua de la Biblioteca Pública de
Nueva York reside en la fecha de autoría. Los estudiosos piensan que
puede ser la primera versión escrita del relato de Juan Diego y las
apariciones en el cerro del Tepeyac. El documento puede haber sido
manuscrito por el mismo Antonio Valeriano (ca. 1531-1605) y por lo tanto
es más cerca de la versión original de la narrativa de Juan Diego que
las narraciones posteriores.
Por otro lado, los cuatro bifolios (16 páginas) que componen el
NICAN MOPOHUA (en Náhuatl “Aquí se narra, aquí se cuenta”, atesorado en
esta Biblioteca de Nueva York, representan, sin lugar a dudas, el
documento histórico-religioso más importante de las Américas. Se piensa
que el original estaba escrito en papel de amate y que se hicieron
varias copias. La de esta biblioteca es la más antigua que ha
sobrevivido. Por eso es tan importante.