Si quiero hablar con Dios
Tengo que estar solo
Tengo que apagar la luz
Tengo que callar
Tengo que encontrar la paz.
Tengo que soltar los nudos
los zapatos, la corbata
de deseos, miedos
Tengo que olvidar la fecha
Tengo que perder la cuenta.
Tengo que tener las manos vacías
Tener el alma y el cuerpo desnudos.
Si quiero hablar con Dios
Tengo que aceptar el dolor
Tengo que comer el pan
que el diablo aplastó.
Tengo que convertirme en un perro
Tengo que lamer el suelo
de los palacios, de los castillos
Suntuoso de mi sueño
Tengo que verme triste.
Tengo que sentirme horrible
Y a pesar de un mal tamaño
alegra mi corazón.
Si quiero hablar con Dios
Tengo que aventurarme
Tengo que subir a los cielos
sin cuerdas para sostener
Tengo que decir adiós
dar la vuelta, caminar.
Decidido por el camino
Que cuando se acabe no vendrá a nada
Nada nada nada nada
Nada nada nada nada
Nada nada nada nada
Lo que pensé que encontré.
Gilberto Gil