La cúrcuma es una raíz nativa del suroeste de la
India, y además de ser un condimento básico en la cocina oriental,
pertenece a la familia del jenjibre.
Este pequeño pero poderoso ingrediente tiene múltiples beneficios pero resalta el que ayuda a combatir la diabetes tipo 2.
El Centro de Investigación de Diabetes y Endocrinología, realizó un estudio acerca de los efectos de la cúrcuma en la diabetes, y concluyó que la raíz revierte
muchos de los trastornos inflamatorios y metabólicos asociados con la
obesidad, además mejora el control glucémico. Hasta el momento la
investigación fue basada en modelos de ratones con diabetes tipo 2. Pero ahí no para la lista, ingerirla también tiene otros beneficios que te vamos a contar a continuación.
Alivia la artritis
Gracias a que la cúrcuma tiene propiedades
desinflamatorias, las personas con artritis reumatoide resultan
beneficiadas ya que su efecto es similar al ibuprofeno.
Combate acidez estomacal
Evita que se formen gases y protege la mucosa intestinal, lo cual favorece al buen funcionamiento digestivo.
Antioxidante
La cúrcuma combate las sustancias que oxidan al cuerpo y evita que las células corporales se deterioren.
Digestivo
Es catalogada como una planta digestiva, la cual ayuda a la estimulación de los jugos gástricos.
Cuida el corazón
No sólo te permite que tengas una vida más saludable, la cúrcuma disminuye el colesterol y triglicéridos; con ello se pueden prevenir infartos y enfermedades cardiovasculares
¿Y tú, ya conocías este condimento?