BUSCANDO AYUDA
El Llanero Solitario no tenía nombre. Y no era tan solitario.
No venció a los chicos malos o
escapó del peligro solo. Tenía la ayuda de su leal amigo,
Tonto, sin mencionar a su confiable caballo, Silver.
Los seres humanos no están hechos para conquistar
la vida de forma individual.
Así sea que esté descubriendo un nuevo
programa de computadora,
moviendo un pesado mueble de la oficina, o lidiando con un
problema de trabajo,
algunas situaciones requieren pedir ayuda.
Quizá sea una de esas personas que tienen problemas
para pedir ayuda.
Si es así, recuerde que su necesidad es normal, sea de origen físico,
emocional, financiero o técnico. Puede tomarle tiempo
encontrar al consejero correcto, al amigo,
al compañero, o miembro de la familia,
pero enviar un S.O.S. cuando lo necesita es signo
de madurez, no de debilidad.
Encontrar un soporte o guía puede hacerle cambiar grandes
cosas en
su trabajo, la forma de pensar sobre su trabajo,
y quizás lo más importante, la manera de vivir fuera
del trabajo.
No tenga miedo de buscar ayuda cuando la necesite.
Y recuerde que la persona
en la que usted busca ayuda hoy, podría ser la que
necesite su experiencia,
guía, o soporte moral en algún momento de la vida.
D/A