Navidad, algunos felices y otros tristes.
La Navidad viene envuelta en una nube de amor
y la adorna un arco iris de paz sobre su cabeza.
Trae un rostro de alegría para algunos
y un rostro de tristeza para otros.
La Navidad viste su traje de fiesta
y llena a la familia de gran alegría.
La Navidad también se viste de luto para otros.
Hay quien llora y no quiere recordar.
Hay quien llora a la madre ausente,
la madre que se ha ido al cielo.
La familia llora de pena en Navidad.
La Navidad se viste de contraste
y es alegría en otras familias enteras.
La Navidad les llena de mucha alegría y felicidad.
La familia se abraza y cena junta
con un delicioso plato navideño.
En otros hogares la cena es escasa,
no hay hallacas ni pan de jamón.
La pobreza es una realidad en Navidad.
Algunos tienen los medios para celebrar su cena de Navidad
y otros se conforman con imaginar.
La Navidad es un contraste que no puede cambiar.
La alegría será el vestido de unos
y la tristeza será el vestido de otros.
La Navidad nunca dejará de ser una gran fiesta.
Siempre será un banquete, donde se ríe y se llora.
el pastor
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