“Cuando la luz pasa a través de la atmósfera terrestre, los colores
son desviados y dispersados en muchas direcciones por las
moléculas atmosféricas. Los colores azul y morado son los que
más se desvían haciendo que se dispersen por todo el cielo, por
eso es que vemos el cielo color azul. Así es el amor de Dios
cuando se despliega sobre la humanidad nos hace ver lo que
antes eran cielos oscuros como cielos abiertos y llenos de Gloria”.
Serafín Contreras G.