"Un aire fresco sopla en mi rostro
y parece hacerme recordar que Dios
es mi Sol que alumbrará mi camino
y mi escudo que me protegerá.
Puedo levantar mi voz en alto y
decir..
No estoy solo...
Estoy acompañado,
Dios es mi fuerza...
El Señor me cuidará".
S. Contreras