EL RIÓ Y YO
Sentada junto a un rió (rió negro) sola con mis
pensamientos, observo las aguas que bajan desde
su nacimiento (que la verdad es digno de ver)
como brotan las aguas, unas aguas cristalina
que te invitan a beber.
van serenas y tranquilas caminando entre las
piedras, nos van contando sus. Y tambien sus
alegrías, cuantos recuerdos, cuantas penas
cuantas alegrías y tambien cuantos sufrimientos
cuantas vivencias señor en tan poquísimo tiempo
hay que ver los recuerdos como fluyen cada
vez que vas alli o simplemente lo recuerdas
con ese inmenso cariño que se siente por el lugar
donde naciste y te hiciste mujer.
Tus primeros sueños de niñez que feliz te sientes
al recordar tus penas y alegrías, tus juegos en la
niñez cuando ibas al rió y te parabas a mirar
como las truchas nadaban, como las madres y
hermanas lavaban la ropa, y el rió se llevaba toda la suciedad,
Las aguas bajan claras y cristalinas y no se
paran jamas, jamas hasta llegar a su mar,
yo las veo bajar las conozco desde niña ella
me escucharon cantar, y muchas veces llorar,
unas veces de tristeza y otras de felicidad pero
eso ya esta pasado y las tristezas no me gusta
recordar, solo quiero alegrías que me alegren
al pensar, ciertas penas ya están olvidadas, por
que el rió las arrastro hacia la mar.
Aguas que bajáis entre árboles y piedras, y
a las orillas también hay prados donde
se recogen los alimentos para los anímale
allí es donde las hierbas crecen mucho
mas de prisa por la humedad) yo me pongo a
escuchar como el rió se deja escapar,
sus gemidos, y tambien su sensibilidad,
cuantas cosas tú me cuentas, cuanta felicidad
has visto y cuanta tristeza tambien.
Pero de tus sonidos salen esos ruidos tan
sabios que tan pocos saben descifrar,
son tus alegrías y tus penas que al aire
quieres hecha, muchas son las personas
que se sientan a escuchar, pero ellas no saben
que tu les estas contado mucho mas, ellas vive
pero ignoran todo lo que tu y tu sabiduria nos
quieres enseñar, y si tú dices algo por loco
te toman y ya nunca dices nada mas, tu te
sientas en silencio para poder escuchar la
penas o las alegrías que el rió te pueden contar,
Yo a ti te digo que nunca cuentes lo que puedas tú
sentir por que el que se cree tan listo siempre
se reirá de ti. Nunca hagas caso de lo que te
quieran decir, sigue tus impulsos y escucha
como las aguas te advierten de lo que pueda
surgir, siéntate y escucha y ala vez mira como
bajan muy tranquilas por que el sonido a veces
también a ellas las hacen de pensar, que se
acerca una tormenta y ya les cambia la
serenidad por que el aumento del agua ya no
las dejara pensar ni poder de la tranquilidad disfrutar.
Las lluvias son torrenciales, y se llevan con
ellas todo lo que a su paso se puedan
encontrar, estas son las limpiezas que se
hacen cada año por que tambien el los ríos se
acumulan malezas, y la naturaleza que es la
mas sabia hace que de cuando en cuando
todo se puede purifica
mira que sucias bajan las aguas de tanta
suciedad que llevan tanto de las hojas
secas, como de tantas malezas que se arrojan
alas aguas sin pensar que ellas son vida y
también llevan su muy conocida inteligencia
No te preocupes por la subida de las aguas
por que ya pronto estarán serenas y ellas
con sus ruidos y sus cantos vuelven a
escuchar nuestras penas.
Cuantas veces te añoro y solo te puedo ver
con los ojos de mi mente y de mi corazon también
pero siempre que a mi pueblo voy yo te
escucho con alegría por que se que tu me
ayudaras para que en algún momento yo
mis sueños los vea hechos realidad
M L Freitas Abril 2003 Madrid