Madrid, ciudad verde
Alguien que no conozca Madrid podría pensar que se trata de una ciudad inhabitable y desértica, en la que el hormigón y el asfalto lo dominan todo. Nada más lejos de la realidad.
Madrid es una ciudad verde.
Si los árboles y parques urbanos son uno de los principales ingredientes de la calidad de vida en nuestras ciudades,
la Ciudad de Madrid puede presumir de ser la segunda ciudad del mundo con mayor número de árboles en sus calles, con 248.000 árboles de alineación, sólo superada por Tokio.
Estas alineaciones arbóreas constituyen auténticos corredores botánicos que sirven de enlace entre las diferentes zonas verdes de la ciudad y que contribuyen a mejorar la calidad de vida de los madrileños.
El Ayuntamiento de Madrid, buscando conseguir una ciudad con más y mejores árboles, puso en marcha hace 10 meses la campaña
Un alcorque, un árbol, en la que pedía la colaboración a los madrileños para que todos los alcorques de las calles de Madrid tuvieran su correspondiente árbol, y no quedase un alcorque vacío.
El objetivo de esta campaña era aumentar el patrimonio arbóreo, renovar el arbolado sustituyendo los tocones de los árboles muertos y peligrosos por ejemplares sanos y con futuro, incrementar la biodiversidad introduciendo nuevas especies adecuadas al clima y las condiciones de Madrid, e incrementar la calidad del arbolado que se planta adecuándolo al entorno donde se va a desarrollar. La campaña está siendo todo un éxito, con
más de 13.000 árboles plantados, de 63 especies distintas distribuidas por 2.572 calles de Madrid.
Aunque algunos se empeñen en afirmar lo contrario,
en la Ciudad de Madrid, con sus calles pobladas de árboles, se respira mejor que en cualquier capital europea. No en vano, Madrid es la ciudad europea con mayor número de árboles y metros cuadrados verdes por habitante, y las zonas verdes están repartidas por toda la ciudad, para que los madrileños dispongamos de
una zona verde a menos de 15 minutos caminando desde nuestras casas.
Nuestra Ciudad cuenta con una superficie verde cercana a las 21.000 hectáreas de las cuales 5.000 corresponden a parques y jardines municipales.
Esa superficie verde crece de forma constante y continuada, superando también la media europea. Desde 1997 las zonas verdes se han incrementado en un 16%. Actualmente, un 8,2% del suelo de Madrid es zona verde, lo que supone una dotación de
16 m² de zona verde por habitante, superando holgadamente los 10 m² por habitante que recomienda la Organización Mundial de la Salud.
Madrid es una ciudad que apuesta claramente por la conservación y mejora del medio ambiente y porque las condiciones de vida de sus ciudadanos sean las más óptimas. En los últimos cuatro años,
el presupuesto destinado a Medio Ambiente en el Ayuntamiento de Madrid ha crecido un 74% y el de zonas verdes un 80%.
Entre mayo de 2003 y finales de 2007,
en Madrid se plantaron 525.573 nuevos árboles (23 veces la masa arbórea del Retiro), frente a los 93.116 de la anterior legislatura.
En los dos últimos años se han plantado el mismo número de árboles que durante los quince anteriores. Esa cifra récord de nuevas plantaciones contribuirá a absorber más de tres mil toneladas de CO2 al año.
En estos últimos años, en nuestra ciudad se han creado nuevas zonas verdes como la
Cuña de O’Donnell, el
Parque de Valdebebas y el de
Juan Pablo II, que han empezado a ser ya nuevos espacios recreativos en avanzada ejecución, a los que en el futuro se unirá la
Casa de Campo del Norte. También se ha cerrado el
Anillo Verde Ciclista, en el que se han plantado 15.800 árboles y 550.000 arbustos en las bandas laterales, que convierten el recorrido en un parque lineal de más de 60 kilómetros.
Pero será en el recuperado río Manzanares en el que se verá el mayor cambio.
El soterramiento de la M-30 ha liberado 500.000 m² para nuevas zonas verdes que se desarrollarán durante los próximos años en el
Proyecto Madrid Río, y que formarán parte de un corredor ambiental de 3.500 hectáreas desde Getafe hasta El Pardo.
Desde el Ayuntamiento de Madrid se ha diseñado una política de uso de los parques madrileños para lo que se han elaborado los
Planes Rectores de Uso y Gestión, se han creado las figuras del
Conservador del Parque, la de los
Agentes de Parques, y se ha puesto en marcha el
Plan de Restauración de Zonas Verdes Degradadas, a través del cual se llevarán a cabo 250 actuaciones puntuales de mejora de espacios verdes y zonas ajardinadas en los 21 distritos de Madrid.
En esta misma línea, el Ayuntamiento también introdujo
limitaciones en el tráfico rodado en la Casa de Campo, el parque del Oeste y la Dehesa de la Villa, recuperando nuevos espacios para el disfrute de los madrileños, y se concluyeron en su totalidad las obras de instalación de la
red de riego con agua reciclada, procedente de la Estación Regeneradora de Aguas Residuales de La China, que han permitido que 16 grandes parques de Madrid se rieguen ya con agua reciclada.
Además, esta política de conservación está siendo complementada con los
planes de poda, que este año ha afectado a 19.195 unidades, mediante actuaciones consistentes en eliminar ramas secas, rotas o en mal estado, que pueden suponer un riesgo para el ciudadano. La poda se hace necesaria también para buscar la verticalidad de la estructura del árbol, equilibrando su copa y aligerando el peso.
Si como decía al principio, los árboles y parques urbanos son uno de los principales ingredientes de la
calidad de vida en nuestras ciudades,
los madrileños podemos estar orgullosos del patrimonio verde de la Ciudad de Madrid, y también del mantenimiento y conservación que de él se realiza.
Madrid es una ciudad verde,
ayudemos entre todos a que siga siéndolo.