Las personas que duermen más de 9 horas al día experimentan un declive cognitivo más veloz que aquellas personas que duermen durante períodos de entre 6 y 8 horas diarias según publica un estudio de la revista Journal of Psychiatric Research. La investigación se basa en un análisis realizado durante 3 años con más de mil personas que, sumando el tiempo de descanso nocturno y la siesta, dormían al menos 9 horas cada día.
Estudiando su evolución los científicos observaron que el deterioro cognitivo en los que dormían más era de 0,2 puntos al año según el Mini-Examen del Estado Mental (MMSE por sus siglas en inglés), una prueba práctica que permite establecer el grado del estado cognoscitivo del paciente y poder detectar, de este modo, signos de demencia. En comparación, para quienes dormían las horas recomendadas (menos de 8) el declive en la misma escala era de 0,0 puntos al año.
Está claro entonces que se confirma que todo exceso es malo y tan perjudicial es dormir pocas horas como dormir horas de mas como podemos.