Tres gallegos llegan a la estación de trenes cuando ya está partiendo el último tren del día, de Madrid hacia La Coruña. Comienzan a correr porque el tren ya está en marcha. El primero puede subir con ayuda del guarda, el segundo con mucho esfuerzo logra trepar, pero el tercero no puede alcanzarlos y queda en el andén. Una persona ve esto y le dice al último: -Bueno, buen promedio, de tres subieron dos Pero el gallego que quedó de a pie le aclara: - Sí, puede ser... pero el que tenía que viajar era yo. Ellos vinieron a despedirme
Un maestro pregunta a sus alumnos: ¿Cómo sería para ustedes una muerte bella? A lo que una pequeña en el fondo de la clase responde: Sería morir como mi abuelo ¿Y cómo murió tu abuelo? La pequeña le responde: Se durmió. Entonces el maestro les pregunta: ¿Y cómo sería para ustedes una muerte atroz? Sería morir como los amigos de mi abuelo. El maestro intrigado le pregunta entonces a la muchachita: ¿Y cómo murieron? - Ellos iban en el coche de mi abuelo cuando el se durmió
CONFUSIÓN Llegó el último día de clases y los alumnos le llevaron regalos a la maestra. El hijo del florista le entregó un ramo de flores, y la hija del confitero, una hermosa caja de bombones. En eso, el hijo del dueño de la bodega se acercó cargando una caja grande y pesada. Al recibirla, la maestra se dio cuenta que algo escurría por la base. Con el dedo recogió una gota del líquido y la probó. ¿Es vino? -dijo tratando de adivinar. No, respondió el chico. La maestra probó otra gota y preguntó: ¿Champaña? No. Me rindo. ¿Qué es? ¡Un perrito!
Mujer imita la forma de hablar de personas de diferentes países de latinoamerica, como argentina, puerto rico, colombia, además de hablar varios idiomas entre ellos el inglés, francés, hebreo, alemán, italiano.
El concurso para la realización del proyecto del túnel del Canal de la Mancha que unía Gran Bretaña con Francia fue muy particular. -Nosotros nos comprometemos a realizarlo por 1.000 millones de marcos, -ofrece una alemán. -Mi empresa lo haría por 40.000 millones de liras –es la oferta del italiano. -Para que ustedes se decidan los franceses lo haríamos por solo 1.000 millones de francos. La última plica es de una empresa española: -Por un millón de pesetas se lo hacemos nosotros. -¿Pero cómo piensa usted que le salga tan barato? -Mire, ponemos a un obrero a cavar desde Dover y otro desde Calais y cuando se encuentren, ya tienen ustedes su túnel. -¿Y si no se encuentran? -¡Ah, bueno... les dejamos los dos túneles por el mismo precio!