Busco un hombre


Que entienda de amaneceres y crepúsculos
Que encuentre la respuesta distinta en cada escena
Que instalado frente a la luz
preste su sombra
Que con los ojos cerrados encuentre mi mirada
Estando dispuesto a partir
sin que sea preciso regresar
Un cazador en vigilia permanente .
Un buscador de ideas.
Un trabajador contra el olvido
Que en su futuro decida la vida del pasado
Y que mute el horror en flores rojas
Un caminador de las cuatro estaciones
que se estimule con la dificultad
Un buceador de la palabra justa
Como testimonio de una vida suficiente
Que sepa recuperar la nobleza que la vida nos usurpa siempre
Que no lo fagocite el agujero del tiempo
Que sepa lo mejor del mar en la orilla y el horizonte
Que desestime la progresiva uniformización de la estética
Devorada por la promiscua seducción de lo masivo
Que sus silencios no tengan el gesto endogámico de los delfines
¡ que disfrute de la alteridad!
Que sepa que la muerte no es el fin de los placeres
¡ Sino el placer que en el placer se detiene!
Un hombre al fin
Con una imaginación gratificante
Que me ayude a conciliar mis propios sueños.


Beba Goméz