
EL VIEJO Y SU PERRO
Hoy, he visto desde mi ventanal, un cuadro que me ha dejado pensando...
Un hombre, ya viejo, muy, muy pobre, segùn sus vestiduras y su aspecto, se sentò en las gradas de la estatua que perpetùa al fundador de Santiago de Chile, don Pedro de Valdivia, y, allì, comenzò a compartir su magra comida con su flaco perro.
Es verdad, hay pobres que tienen el corazòn de oro, que comparten lo poco que tienen con quien lo necesite, sea otro ser humano, o un mìsero animal, que es , por lo que se ve, su unica compañìa, su ùnica familia...
Pero...¿què es la familia?
Lazos indisolubles de sangre, que no siempre significan cariño, calor, piedad, dulzura, y todas esas cosas lindas que soñamos cuando pensamos en un "hogar".
Calidez desconocida por muchas personas que estàn solas en el mundo, no por no tener parentela, sino, porque esos lazos de sangre, se han convertido en agua, y no siempre en agua limpia, pura, cristalina...
El viejo y su perro famèlico, se han marchado ya, y yo me he quedado sola, con mi mùsica, mis ilusiones, mi vida, la cual trato de hacer lo màs grata posible para una persona ya de años, que siente la alegrìa y la felicidad de vivir, la gratitud hacia el Creador, de despertar cada mañana y tener tàntas cosas de las cuales màs de la mitad del mundo carece hoy por hoy.
Bien, amig@s, eso querìa contarles hoy...
Quizàs, es algo sin importancia, pero, es parte de mì, de mis pensares, de mi visiòn de las cosas, por eso, las comparto...
Con estas lìneas, me estoy dando un poco a ustedes...
Y eso, es una de las cosas màs lindas del vivir...darse, dar, lo poco o lo mucho que se tiene, pero compartir...como ese viejo con su flaco perrito.
Les quiere
(Red)
|