COMO HACEMOS SENTIR A LAS PERSONAS QUE NOS RODEAN?
El 14 de octubre de 1998, en un vuelo trasatlántico de una linea aérea, tuvo lugar el siguiente suceso:
A una dama la sentaron en el avión al lado de un hombre de raza negra. La mujer pidió a la azafata que la cambiara de sitio porque no podía sentarse al lado de una persona tan desagradable. La azafata argumentó que el vuelo estaba muy lleno, pero que iría a revisar a primera clase por si acaso podría encontrar algún lugar libre.
Todos los demás pasajeros observaron la escena con disgusto, no sólo por el hecho en sí, sino por la posibilidad de que hubiera un sitio para la mujer en primera clase. El pobre hombre quedó incómodo y cohibido por la reacción de su compañera de asiento, pero tuvo la educación de no hacer un escándalo.
El clima en la cabina era de total tensión, pero la señora se mostraba feliz, hasta triunfadora por que la iban a quitar de ese sitio y ya no estaría cerca de aquella persona. Minutos más tardes regresó la azafata y le informó a la señora:
-Discúlpeme, señora, todo el vuelo está lleno, pero afortunadamente encontré un lugar vacío en primera clase. Me demoré unos instantes porque para poder hacer este tipo de cambios le tuve que pedir autorización al capitán.
El me indicó que no se podía obligar a nadie a viajar al lado de una persona tan desagradable, y que me autorizaba el cambio.
Los pasajeros no podían creer lo que escuchaban, pero ya la señora, con cara de triunfo, empezó a levantarse de su asiento. Y en ese momento la azafata se voltea y le dice al hombre de raza negra:
-Señor,¿sería usted tan amable de acompañarme a su nuevo asiento en primera clase?
El capitán, en nombre de la compañía, le ofrece sus disculpas personales por el hecho de que haya tenido que soportar a una persona tan desagradable a su lado.
Todos los pasajeros del avión se pararon y ovacionaron la acción de la tripulación.
Ese año la azafata y el capitán fueron premiados, y gracias a esa actitud, la empresa se dió cuenta de que no le había dado demasiada importancia a la capacitación de su personal en el área de atención al cliente, así que hicieron cambios de inmediato.
Desde ese momento en todas las oficinas de la aerolínea, y a la vista del personal, se lee el siguiente mensaje:
"Las personas pueden olvidar lo que les dijiste...
las personas pueden olvidar lo que les hiciste...
pero las personas nunca olvidarán como los hiciste sentir".
Esto no solo ocurre con la raza, también con las religiones y los estatus sociales, para la época que actualmente vivimos realmente ya no debería de pasar nada de esto pero lamentablemente se sigue dando, intentemos cambiar esta situación para que aportemos un granito de arena y así nuestro mundo sea un mejor lugar para todos,recordemos que a través de la tolerancia estamos acercandonos un poco más a Dios.
Desconozco el Autor.