En un crucero al caribe había un mago para entretener a los pasajeros,
mientras el sujeto realizaba su acto, justo detrás de él siempre había
un perico en su percha que observaba detenidamente sus movimientos y que
justo en el clímax de los trucos soltaba expresiones tales como:
Está en el sombrero..."
"Lo sacó de la manga..."
"La caja tiene doble fondo..." etc, etc, etc.....
Sistemáticamente echaba a perder el número del prestigiador Mago...
Cierto día, durante una función en que el plumífero se había portado especialmente
insolente, repentinamente estalló una de las calderas del barco, logrando que el
barco se fuera a pique con todo y pasajeros y tripulación...
Días mas tarde, el perico y el Mago se encontraron como náufragos flotando en sendos
maderos, y curiosamente, el animalito no dijo ni una sola palabra por espacio de
dos días, solo se miraban fijamente y el cotorro trataba de analizar la situación...
Hasta que por fin el ave se le quedó viendo fijamente al Mago y le dijo:
"Me doy cabrón, dónde metiste el pinche barco????