Cuando hay amistad, todos los pensamientos, todos los deseos, todas las esperanzas nacen y se comportan en espontánea alegría.
Cuando te separes de un amigo, no sufras porque lo que mas amas en el se volverá más nítido en su ausencia; así como la montaña es más clara desde el llano para el montañés.
Y no permitas más propósito en la amistad que la consolación del espíritu.
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