No quiero que me digas que me quieres ni que intentes
explicar con palabras lo que Puede habitar solo en el
corazón.
Yo no quiero tus flores para que se marchiten tristes,
ni quiero que me llames y me hables razón pecado.
Sólo pido fija tu mirada en mí,
Sólo quiero entera para mi, tu voz.
Yo no quiero una noche eterna de caricias
pues solo con un beso siempre Podría vivir.
Tan solo con tu dulce aliento en mis oídos
Tan sólo hundiendo en tu pelo mi nariz.
Sueño que Acaricio con dedos invisibles tu cuerpo,
y que me buscas, y me encuentras al fin,
y luego, al despertar cuando sé es que mi sueño
sería el mejor lugar para vivir.