Para personas decaídas:
Durante nueve días, a las doce de la noche, pondremos en la mesilla de noche de la persona decaída, o en su defecto, delante de una foto de la afectada: un platito blanco con una cucharada de menta fresca, una de hojas y flor de romero, tres granos de pimienta y un objeto o joya pequeña que lleve la persona en cuestión tocando la piel. Lo rociaremos todo con un poquito de agua de rosas y prenderemos una vela verde por espacio de diez minutos diarios, mientras pedimos mentalmente que recupere la perdida vitalidad.