Los jóvenes saben cómo protegerse del SIDA, pero aún así no lo hacen.
"La información y el conocimiento son necesarios pero no suficientes", afirma Paz Bermúdez, profesora de psicología de la Universidad de Granada y autora de una investigación sobre los factores que determinan las conductas de prevención del SIDA en adolescentes. El 58% de los nuevos enfermos diagnosticados tiene una edad comprendida entre 25 y 34 años, lo que significa que muchos de ellos contrajeron el SIDA en la adolescencia.
Los programas educativos y de motivación suelen tener poco éxito porque no están teniendo en cuenta estas conductas. En el estudio participaron 657 adolescentes de entre13 y 18 años de diferentes ciudades y pueblos de España.
La investigación indica que existen barreras psicológicas que impiden que se tomen las medias necesarias, incluso aunque dichas medidas se conozcan. Por ejemplo, ideas erróneas, como que el SIDA es una enfermedad de homosexuales o problemas de asertividad (dificultades para negarse a hacer algo que no desea hacer). "Se ve en los casos de chicas que se exponen a las enfermedades de transmisión sexual porque sus parejas no quieren mantener relaciones con ellas si no es sin preservativo", dice Bermudez.
También es importante la influencia del grupo de amigos, sus normas y las ideas que transmiten, ya que para los adolescentes es muy importante la opinión de sus compañeros.
2005