De: mini070 (Mensaje original) |
Enviado: 25/11/2006 09:31 |
| | click
Decid cuando yo muera... (¡y el día esté lejano!): soberbio y desdeñoso, pródigo y turbulento, en el vital deliquio por siempre insaciado, era una llama al viento...
Vagó, sensual y triste, por islas de su América; en un pinar de Honduras vigorizó el aliento; la tierra mexicana le dio su rebeldía, su libertad, su fuerza... Y era una llama al viento.
De simas no sondadas subía a las estrellas; un gran dolor incógnito vibraba por su acento; fue sabio en sus abismos -y humilde, humilde, humilde- porque no es nada una llamita al viento...
Y supo cosas lúgubres, tan hondas y letales, que nunca humana lira jamás esclareció, y nadie ha comprendido su trágico lamento...
Era una llama al viento y el viento la apagó.
| | | | | | | | | | | | | | | | | | | | | |
|