Abundia, Abundia, Abundia, gran ser angelical de la Abundancia y la
Prosperidad Divina, yo vengo aquí al valle sagrado de la petición sincera,
de la petición divina. Extiendo mis brazos hacia ti. Amada Abundia y con
gran respeto ofrendo mis peticiones para que sean saciadas con tu Divina
voluntad y con toda tu fuerza y tu divina y extraordinaria potencia.
Abundia, Abundia, Abundia, úngeme en el mar sagrado de tu divina
prosperidad y báñame con el chorro de los caudales del río sagrado de la
abundancia, dame sabiduría para obtener cada una de las bendiciones que
recibo, que estoy recibiendo y que voy a recibir de tus grandiosas
bendiciones por tu bendita mano. Dame oro que es el metal mas puro para
purificar mis bolsillos, dame rubíes, dame zafiros, dame diamantes y dame
olivos, llaves divinas para abrir puertas y que esas puertas lleven a mi y a
mi familia por senderos de prosperidad y de abundancia infinita, y que todo
tu poder y que toda tu fuerza caiga y recaiga sobre mi, sobre mis
manecillas, sobre las arcas de mi hogar y sobre todo sobre la certeza firme
de que tu abrirás ese grandioso Reino de Prosperidad y de Abundancia para
poder obtener y saciar todas aquellas peticiones que en mi esperan, y que se
realice de inmediato en el momento de yo leerlas, de yo sentirlas y de
escucharlas, y que esto
Así es, Así es, Así es