Las amargas más comunes son: ruda, altamisa, cicuta, romero, borrachero, diosma y tomillo. Las hierbas dulces son: hierbabuena, manzanilla, toronjil, cidrón, limonaria, albahaca y destrancadera.
Debes hervirlas por separado en dos recipientes durante unos diez minutos. Las retiras, las dejas enfriar y luego cuela las hierbas. Entonces, puedes llenar, con el líquido obtenido, dos atomizadores, uno para cada tipo.
Luego, vas habitación por habitación (desde el interior hacia la puerta de entrada de la casa) y rocíalas. Primero usa las amargas; luego las dulces.