ANDAR DESCALZO...
Andar descalzos no significa únicamente quitarse los zapatos. Significa
conectarse con la tierra, con la arena, con la hierba, es algo así
como tocar su piel, como besarse con la naturaleza. Un placer delicado,
sutil, sensual, que siempre me llena de una energía especial, como
me sucede cuando me mezclo con los colores de un atardecer,
con su olor, con su mirada, con la sorpresa que siempre me provoca
la belleza, como esa primera vez de algo, como todas las primeras
veces que se repiten una y otra vez.
Podemos elegir la vida que deseamos vivir, yo creo eso. Aunque por
alguna razón en ocasiones se nos escapan de las manos o de
los pensamientos nuestras intenciones. Se nos revela el inconsciente
tal vez, saturado de tanto mensajito negativo que se reciben, tal vez
funcione eso de colocar un filtro antispam a nuestros pensamientos,
probablemente nos impactaría su visualización numérica.
Crear no es solo una cuestión artística, es una cuestión del corazón,
es una decisión que parte desde lo más profundo de nuestro ser.
Es posible crear la vida que deseamos, al menos es posible intentarlo
y yo estoy dispuesta a ello. ¿Te animas?