FILOSOFÍA DE LA TERCERA EDAD
¿Te das cuenta que la única vez en nuestras vidas en la que nos
gusta envejecer es cuando somos niñ@s?
Si tienes menos de 10 años, estás tan entusiasmad@ con el
envejecimiento que piensas en fracciones.
Te preguntan: -¿Cuántos años tienes?
Y respondes: - ¡Tengo cuatro años y medio!.
Nunca decimos p.e. ¡Tengo treinta y seis y medio!.
Estás en cuatro años y medio, ¡llegando a cinco!... ¡Ésa es la clave!
Cuando entramos en la adolescencia, vamos aún más aprisa...
Saltamos al siguiente número, o incluso un poco más...
"¿Cuántos años tienes?” - te preguntan-
Y respondes: -¡Voy a hacer 16! ... y podrías tener 14, pero NO,
¡vas a hacer 16!
Y entonces llega un día grande en tu vida ... vas a cumplir
los 21años....
Te sientes mayor, maduro. Pero aún queda un camino de vida...
¿Qué ocurre después de cumplir los 30?…
Dilo con sinceridad... -entra un cierto vértigo-, ya empieza a no parecer
tan divertido jugar a contar los años.
Pero... ¿Qué es lo que sucede? ... ¿Qué ha cambiado?
Cumpliste los 21, llegaste a los 30, y te estás acercando de pronto
¡a los 40! sucede sin más, sin avisar .... Whoaaa! Pon los frenos,
todo se te está escapando. Antes de que te des cuenta, llegarás a
los 50 y tus sueños se habrán ido.
Pero espeeera... (sonrío)
Podrías llegar perfectamente hasta los 60.
¡No creías que esto sucedería!
Así que cumpliste 21, llegaste a los 30, enseguida aparecieron los 40,
superaste los 50, rebasaste los 60...
¡Has acumulado tanta velocidad que consigues ponerte en los 70!!
Después de esto es cosa de ir poquito a poco...
Recibes a los 80 y cada día se convierte en un ciclo vital completo,
conseguiste llegar al almuerzo; pasaste las 4:30; llegas a la hora
de cenar, acostarte y... no termina ahí, ¡amanece un nuevo día! y...
te descubres viv@!.
En los 90, comienzas a ir hacia atrás; -¡Yo estoy en los 92!
Entonces sucede algo extraño.
Si tu cumples más de 100, te conviertes en un niño otra vez.
¡Yo tengo 100 y medio!!
¡¡Que todos vosotros lleguéis a un saludable 100 y medio!
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Autor: George Carlin con 102 años.
Colaboración y envío que agradecemos a:
La Hna. Dominga Rodríguez.