Y punto. **Hoy tienen cincuenta y pico, y son bellas, muy bellas, pero
también serenas, comprensivas, sensatas, y sobre todo,
endiabladamente seductoras, esto a pesar de sus incipientes
patas de gallo o de esa afectuosa celulitis que capitanea a algunas
sus muslos, pero que las hace tan humanas, tan reales.
Hermosamente reales. Casi todas, hoy, están casadas o divorciadas, o divorciadas y
vueltas a casar, con la idea de no equivocarse en el segundo intento,
que a veces esun modo de acercarse al tercero, y
al cuarto intento. ¡Qué importa!
Otras, aunque pocas, mantienen una pertinaz soltería y la
protegen como ciudad sitiada que, de cualquier modo, cada
tanto abre sus puertas a algún visitante. Nacidas bajo la era de Acuario, con el influjo de la música de
Los Beatles, de Bob Dylan....
Herederas de la "revolución sexual" de la década de los 60 y
de las corrientes feministas que, sin embargo, recibieron pasadas por varios filtros, ellas supieron combinar libertad
con coquetería, emancipación con pasión, reivindicación
con seducción.
Jamás vieron en el hombre a un enemigo a pesar de que le
cantaron unas cuantas verdades, pues comprendieron que
emanciparse era algo más que poner al hombre a trapear el
baño o a cambiar el rollo de papel higiénico cuando este,
trágicamente, se acaba.
Son maravillosas y tienen estilo, aún cuando nos hacen sufrir,
cuando nos engañan o nos dejan. Usaron faldas hindúes a los 18 años, se cubrieron con sweaters
de lana, vistieron maxis, minis, shorts con botas; y perdieron
su parecido con María, la virgen, en una noche loca de viernes
o sábado después de bailar.
Hablan con pasión de política y quisieran cambiar el mundo. Aquí hay algunas razones de por qué una mujer de más de 50
nunca te va a despertar en la mitad de la noche para preguntarte:
"Qué estás pensando?" No le interesa lo que estás pensando.
Si una mujer de más de 50 no quiere mirar un partido de
fútbol, ella no da vueltas alrededor tuyo. Se pone a hacer algo que ella quiere hacer y generalmente
es algo mucho más interesante. Esa mujer se conoce lo suficiente como para estar segura
de sí misma, de lo que quiere, y de con quién lo quiere.
Son muy pocas las mujeres de más de 50 a las que les importa
lo que tú pienses de lo que ella hace. Tienen cubierta su cuota de relaciones "importantes" y "compromisos".
Son generalmente generosas en alabanzas. Tienen suficiente seguridad en sí mismas.
Las mujeres se vuelven psíquicas a medida que pasa el tiempo. No necesitas confesar tus pecados, ellas siempre los saben. Son honestas y directas. Te dicen directamente que eres un
imbécil si es lo que sienten sobre ti. Tenemos muchas cosas buenas que decir de las mujeres
de más de 50 y por múltiples razones. Lamentablemente no es recíproco.
Por cada impactante mujer de estas, inteligente, divertida y sexy
hay un hombre con casi o más de 50... pelón, gordo, barrigón
haciéndose el gracioso con una chica de 20 años y haciendo