Nuestra Hora
Es sólo un instante lo que yo te pido
una hora tan sólo de tu larga vida,
un solo momento para estar contigo,
un momento nuestro, sólo tuyo y mío,
que nadie nos mire
y que nadie escuche lo que yo digo.
Hagamos la cita por algún
paraje despoblado y solo,
donde no haya gente
donde no haya ruido
donde no perturbe nuestro
gran momento,
ni voz ni sonido.
Donde solo el eco de tu dulce acento,
música divina, llegue a mis oídos.
Vámonos a un sitio donde estemos lejos
donde estemos solos y muy escondidos.
En un mundo nuevo,
hecho a nuestro antojo,
en un mundo nuestro,
solo tuyo y mío,
que nadie cuente de nuestra escapada
que nadie diga que te vio conmigo,
que guarde el secreto
de nuestra entrevista.
Yo quiero un momento
que tú me concedas
tan solo un instante a solas contigo.
¡ la vida es tan larga!
Tiene tantas horas....
y es tan solo una,
la que yo te pido.
No guardes temores de que se divulgue
que hayas atendido
mi insistente súplica,
solamente el cielo es mudo testigo
ha de vernos juntos.
¡solámente el cielo te verá conmigo!
Y yo,
por mi parte guardaré el secreto
de la inmensa dicha
que me has concedido,
y me iré muy lejos,
lejos de tu vida y de tu camino,
y no habrá sospechas
de ese gran momento
que juntos vivimos.
Autor desconocido