Una mariposa
Esta mañana en mis labios;
Se posó una mariposa;
Su vuelo era decidido;
Su destino era mi boca.
Algo quería decirme;
Que no supe descifrar;
Su intención era certera;
Animó mi despertar.
Anunciaba que mi destino ;
Era beber de su fuente;
Dejé que resfrescára mis labios;
con su beso tan decente.
Decente porque contenía;
La semilla del amor;
Decente con la pureza;
De un limpio corazón.
No se que pudo suceder;
Con ese beso tan temprano;
Que una linda mariposa;
Me hechizara como humano.
Como humano que esperaba;
Una seña del amor;
Que salía de un corazón temprano;
Y; alimentar mi ilusión.
Un corazón que espera;
Con la brisa de cada mañana;
Ese beso desde Valencia;
A mi tierra Gaditana.
Aires desde Levante;
Que no es, de mi viento castizo;
Aires de una guapa de Valencia;
Que por este gaditano quiso.
Quiso que una mariposa;
Le diera los buenos días;
Quiso que esa mariposa;
fuera mi primera alegría.
Cádiz a 29 de mayo de 2006.
Domingo Ouviña San Isidro.@
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