àmame, mujer , con tu hermosura,
en el fuego de tu llama y tu impaciencia.
àmame con tu amor y tu locura,
hasta que pierda por completo la conciencia.
àmame con la pasión, de suave ola,
con el vaivén de su espuma nacarada.
àmame desde la noche hasta la aurora
hasta el final de un torrente en su cascada.
àmame sin medida en estas horas,
ámame hasta quedarme ya sin vida,
déjame quedarme hasta la aurora
hasta quedarte rendida ya sin vida,
¡Fundámonos en la llama del amor!
Porque sé que jamás, habrá otro encuentro.
àmame hasta que sientas el dolor.
Porque mañana, zarparé yo de tu "Puerto"