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TRANCE
Escucho los sonidos perfectos de mi corazón.
Sus latidos son como plegarias que armonizan mi alma.
No hay síntomas de furia ni sensaciones de agresión.
Voy entrando en un sopor profundo y mil luces de colores se encienden en mí.
Entro en un estado de armonía y mi cuerpo deja de ser compacto.
He comenzado el viaje espiritual.
Laberintos que se abren y mi voluntad que no me pertenece
se entrega a lo desconocido.
Soy inmaterial, me elevo y desde lo alto me veo flotar.
Estado de plenitud. Sin memoria para atrás. No hay sombras.
El aquí y el ahora me pertenecen. Se conjuran.
Vapores. Brisas.Mis sentidos están estimulados y conectados a esta paz.
Siento el vuelo. Y me nacen un par de alas que conducen al infinito.
Que magnifica experiencia es la magnitud de trasportarse al centro
de uno y desmaterializarse por completo.
Así suspendida en el Universo todo es celestial.
Estado de total levedad. Estoy en trance.
Transito por el Edén, visualizo el Olimpo, me hundo en un mar de aguas
azules. y salgo a la superficie en Islas del Pacífico. Soy un pájaro que vuela,
una gacela que corre, un pez que nada.
Soy una nube y el agua fresca del manantial.
Y pierdo la conciencia, ya no me pertenezco en el ensueño de ser
solo Naturaleza.
La humanidad me ha abandonado.
Siluetas de ángeles me transportan y sus cantos se conectan
a mi interior.
Me hallo en el más maravilloso viaje.
Soy etérea. Transparente. Blanca. Pura.
Ya no soy mortal.
Lianca
( Derechos Reservados)
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