Esta rosa en el cielo, inmóvil, pura; y este aire, que la cerca, y la convida: y ella, en su propio sueño suspendida, serena, en su voluble arquitectura.
Es casi de cristal, en la segura presencia de su línea estremecida: tan perfecta, en el tono, y la medida, exactos, de su tedio y su hermosura.
El aire pasa, y ella, sola, queda, embriagada en su tácito perfume, oculta entre su tálamo de seda. Y en la alta noche su virtud resume trémula gota que, en la sombra rueda, y en estéril silencio se consume!
JOSÉ UMAÑA BERNAL ( Colombia, 1899 – 1982 )
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