Yo
seguiré soñando mientras pasa la vida,
y tú te irás borrando lentamente de mi
sueño.
Un
año y otro año caerán como hojas secas
de las ramas del árbol milenario del
tiempo,
y
tu sonrisa, llena de claridad de aurora,
se alejará en la sombra creciente
del recuerdo.
Yo
seguiré soñando mientras pasa la vida,
y quizá, poco a poco, dejaré de hacer
versos,
bajo el vulgar agobio de la rutina diaria,
de las desilusiones y
los aburrimientos.
Tú,
que nunca soñaste mas que cosas posibles,
dejarás, poco a poco, de mirarte al
espejo.
Acaso
nos veremos un día, casualmente,
al cruzar una calle, y nos
saludaremos.
Yo
pensaré quizá: " Qué linda es todavía."
Tú quizá pensarás: " Se está poniendo
viejo "
Tú irás sola, o con otro. Yo iré solo o con otra.
o tú irás con
un hijo que debiera ser nuestro.
Y
seguirá muriendo la vida, año tras año,
igual que un río oscuro que corre
hacia el silencio.
Un amigo, algún día, me dirá que te ha visto,
o una
canción de entonces me traerá tu recuerdo.
Y
en estas noches tristes de quietud y de estrellas,
pensaré en ti un instante,
pero cada vez menos....
Y
pasará la vida. Yo seguiré soñando;
pero ya no habrá un nombre de mujer en mi
sueño.
Yo
ya te habré olvidado definitivamente
y sobre mis rodillas retozarán mis
nietos.
(Y quizá, para entonces, al cruzar una calle,
nos vimos frente a
frente, ya sin reconocernos.
Y
una tarde de sol me cubrirán de tierra,
las manos para siempre cruzadas sobre
el pecho.
Tú, con los ojos tristes y los cabellos blancos,
te pasarás las
horas bostezando y tejiendo.
Y cada primavera renacerán las rosa,
aunque
ya tú estés vieja, y aunque yo me haya muerto.
Josè Angel Buesa