LA CEGUERA DEL ALMA

La ceguera del alma cuando se ofusca

no deja ver con claridad,

como devanean las olas

sin que se vean llegar.

Se mecen cual sauce en tormenta,

se apaciguan cuando están cansadas

de tantos golpes y con las rocas chocar

son, cegueras invisibles

que no dejan ver con claridad.

Sucumbe el día y se enfrenta al crepúsculo,

la mirada se pierde;  no desea ver.

Colores de fuego, paisaje sin terminar.

Se acuesta la noche, el alba lo despertará.

No hay más ciego que el que cierra sus ojos,

tampoco aguas, lluvias, tormentas

fuegos, se apagarán…

la vida es tan hermosa que,

con solo mirarla da ímpetu para volar.

MarisaLlum